Nicola José Yammine Cianmaricone es un joven de 24 años que acaba de finalizar la carrera de Derecho de la Universidad Católica Andrés Bello (UCAB) y está a la espera de título. Es un ucabista destacado debido a que actualmente es Director Ejecutivo de la organización Beca A Un Pana.

Llegó a la UCAB debido a que su hermana estudiaba Ingeniería Industrial de y su mamá es egresada de la escuela de Administración y Contaduría de esta casa de estudios, entonces sentía sienta afinidad hacia la universidad.

Antes de comenzar, me inscribí en la Metropolitana y en la Católica buscando cualquiera de las dos opciones. Como la Católica comenzaba en octubre y la Unimet tenía dos turnos de inicio, uno en septiembre y uno en enero, preferí comenzar en la Católica para ver si me gustaba y, en caso de que no, poder cambiarme. Sin embargo, desde el primer día de clases me convencí de que la UCAB era la universidad en donde yo quería estudiar.

Para Nicola, el Derecho siempre fue su vocación.

Escogí derecho porque siempre encontré en mi carrera la posibilidad de buscar ayudar a los demás y tiene una formación mucho más completa e integral que me permite tener ciertos conocimientos y capacidades que me permitan incidir de manera positiva en la sociedad.

Durante sus estudios, Nicola participó bastante dentro de las actividades de la Universidad. Al inicio de su carrera, fue Coordinador del Primer Año ante el Centro de Estudiantes de Derecho, luego fue Coordinador de Formación en el Comité Integral y, posteriormente, fue presidente del Centro de Estudiantes.

También perteneció al UCAB HNMUN durante tres años consecutivos. En el 2015 representó a la delegación de Bangladesh, donde ganó un premio mención honorífica; luego en el 2016 fue a la delegación de Pakistán y en el 2017 fue jefe de la delegación y ganó dos premios grupales.

Ese año yo gané un premio a delegado sobresaliente, que era el segundo lugar, y adicionalmente el premio a la mejor delegación de toda la competencia y la mejor delegación internacional.

Además de esto, también fue consejero de desarrollo estudiantil en donde buscaba desarrollar proyectos que incidieran de forma positiva en la vida del estudiantado. Uno de estos proyectos fue el desarrollo y reimplementación del proyecto Beca A Un Pana.

Beca A Un Pana nació como un proyecto social en el año 2009 por un grupo de representantes estudiantiles ucabistas que planteaba como objetivo premiar la excelencia y a través de distintas categorías de becas que permitan que los estudiantes puedan seguir estudiando, como la Excelencia Académica, la Excelencia Cultural, la Excelencia Deportiva y la Excelencia Social.

Esta agrupación se mantuvo desde el año 2009 hasta el 2012, pero luego de esa época no hubo una generación de relevo, y Nicola, junto a un equipo de estudiantes, recuperaron ese proyecto.

Nos pusimos en contacto con toda la directiva y nombramos unos nuevos directores para que lleven esta asociación civil. Beca A Un Pana estaba enfocada como un proyecto solamente para la UCAB, pero nos estamos expandiendo a otras universidades en el país. Es por eso que decimos que esta iniciativa está hecha por estudiantes para estudiantes.

Asímismo, Nicola está  desarrollando un programa de televisión junto al ucabista Santiago Acosta llamado “Gente que vale”, en donde buscan plasmar distintas iniciativas, realidades y proyectos sociales desarrollados por venezolanos para promoverlos y demostrar que en Venezuela todavía hay gente que sigue apostando por el país.

Como director ejecutivo tengo muchas responsabilidades, pero como este proyecto se está buscando expandir necesita cumplir ciertos requisitos, así que estamos encima de ello.

Nicola realmente cree en el potencial del país, y todo su trabajo busca fomentar esa característica de los venezolanos para demostrar de lo que puede ser capaz una sociedad.

Estamos acostumbrados a creer que el petróleo o que los diversos recursos son lo que van a ayudar a sacar este país adelante, a hacer que nuestra economía avance o a hacer que nos hagamos ricos para que podamos, en esta oportunidad, utilizar mejor los fondos y dirigirlos de una mejor manera. Pero esto siempre dependiendo de un tercero o de un bien externo a nosotros, y no nos hemos enfocado en explotar la creatividad, la inteligencia de tantos jóvenes que hoy quieren trabajar pero que no tienen los recursos para hacerlo.

Así que yo le diría a todos los patrocinantes, o a quienes hoy pueden ayudar, que crean en la educación como una herramienta de cambio, que le entreguen a los estudiantes la posibilidad de que ellos mismos puedan ayudar a una sociedad que tanto lo necesita. Muchas sociedades en el mundo han surgido sin ningún recurso, sino solamente con el desarrollo de distintas oportunidades brindadas a los jóvenes, y creo que por lo que tenemos que apostar es por la educación, porque siempre es donde los jóvenes podrán cultivarse, formarse y luego utilizar todo ese aprendizaje para dirigirlo a lo que más lo necesita, que es nuestro país.